Después de meses de paro obligado, la nueva realidad cada vez más toma forma. Es cierto que las cosas no serán idénticas a como lo eran al principio del año. Pero poco a poco las medidas restrictivas disminuirán de forma gradual, pero también hará falta que todos pongan de su parte.
Para esto, negocios y empresas han puesto manos a la obra para solicitar los permisos correspondientes para reanudar actividades; siempre y cuando se cumplan estrictamente con las medidas sanitarias que presentó el gobierno y los ministerios de la salud.
A estos protocolos se les suman los que lanzaron los casinos e hipódromos, a través de su Sindicato de Juegos de Azar. Se tratan de una serie de normas que algunos ya han comenzado a implementar. La idea es regresar, pero con cambios obligados.
El paso mes de mayo, Ariel Fassione, secretario gremial del Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar dijo que su objetivo es que las salas de juego se adapten de acuerdo con las medidas con el fin de garantizar que, tanto ciudadanos como trabajadores, estarán bajo las condiciones necesarias para volver sin arriesgar su salud.
“(Nuestra tarea fue) comenzar a diseñar y adaptar las salas, en sus diferentes modalidades, pero también (tomamos en cuenta) los cuidados hacia los compañeros y compañeras con el objetivo de empezar a visualizar un regreso de la actividad”, explicó el ejecutivo.
“La propuesta central se elaborará con la intención de proteger y cuidar a trabajadores y clientes de una actividad que suma más de 250 mil puestos de trabajo en la República Argentina y paga impuestos por miles de millones de pesos”, complementó el directivo.
¿Qué medidas se prevén?
Empresarios y sindicato se han unido para tratar de reactivar el sector del juego y que más de 250 mil empleados regresen a sus puestos de trabajo, por lo que se propusieron diversos puntos, con el fin de que las empresas de esta industria sigan las indicaciones y reanuden labores sin complicaciones.
La principal medida será disminuir el número de jugadores en casinos, previéndose que estos complejos solo recibirán el 50 por ciento de su capacidad, como máximo.
El acceso a estos lugares requerirá una toma de temperatura de manera obligada, tanto en jóvenes como adultos mayores, además de que las filas de acceso se realizarán con distancias de por lo menos un metro de distancia entre una persona y otra.
Toda la plantilla de empleados trabajará en turnos escalonados, con el fin de que no existan aglomeraciones en los vestuarios o, de ser necesario, se recomendará que todos lleguen vestidos con su ropa de trabajo.
Todas las salas de juegos y de tragaperras deberán someterse de forma periódica a desinfecciones. Además de que existirán mesas de desinfección por cada zona de juego con el fin de que los clientes acudan a ellos y se limpien sus manos antes de acudir a cualquier juego.
La distancia entre jugadores deberá mantenerse tanto en las mesas de blackjack y póker como en las máquinas tragaperras, por lo que todos se sentarán dejando un asiento libre entre uno y otro.
Asimismo, los tickets, comprobantes y el efectivo deberán colocarse en el mostrador, con el fin de que el cliente o el trabajador lo tome con el mínimo contacto. No se podrán realizar pagos en la mano.
En el caso de los hipódromos, solo podrán ingresar preparadores, jockeys, cuidadores, empleados de los inmuebles y miembros de la Comisión de Carreras. Todos ellos deberán solicitar y poseer el “permiso de permanencia por reunión”.
Por supuesto, se mantendrá la toma de temperatura y se le negará el acceso a aquellos que superen los 37°C o formen parte de los grupos de riesgo.
Los preparadores y jockeys podrán ingresar una hora antes de la competencia en la que participen. Además, deberán dejar las instalaciones a la mayor brevedad, siempre y cuando no sean requeridos por los comisarios o el servicio veterinario; este último sólo en el caso de los entrenadores.
Crecimiento digital
Mientras las puertas permanecían cerradas, los jugadores encontraron alternativas en la web para jugar los clásicos juegos que se encuentran en los casinos físicos.
Ante el cierre temporal de los casinos, el juego en línea llamó la atención de jugadores expertos y principiantes, quienes se convencieron por la variedad de sitios en internet y los extensos catálogos de juegos con los que cuentan.
Fue así como los casinos virtuales comenzaron a surgir como buenas opciones para los seguidores de los juegos de azar, con plataformas sofisticadas y diversos métodos de juego, además de que ofrecen la posibilidad de jugar con crupieres en vivo, lo cual brinda una experiencia similar a la física, aunque siempre existirán diferencias entre sí.
Lo único que se debe tomar en cuenta es que se debe ser cuidadoso a la hora de elegir un casino en línea, de acuerdo con la reputación y la seguridad de los sitios.
Los que han regresado
Desde el pasado 26 de junio, algunos casinos en Catamarca volvieron a abrir. Esto permitió que otras jurisdicciones argentinas dieran un paso hacia enfrente, como Santa Cruz, La Rioja y San Juan.
Estos complejos han abierto con personal reducido y un máximo de 10 personas por sala de juego, para evitar las conglomeraciones.
“Con esta medida se busca que el porcentaje de ocupación sea mucho menor al que admiten los edificios, ya que así también se podrá mantener la distancia social necesaria para prevenir contagios”, fueron las palabras de Andrés Mercado, delegado del Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara).
En el caso de Santa Cruz, una resolución del Ministerio de Salud y Ambiente le dio el visto bueno al protocolo de funcionamiento para la reapertura de casinos y salas tragamonedas en seis localidades de la provincia. Dicha resolución también señala que se deberán desinfectar las máquinas una vez que el cliente deje de usarlas.